Hoy
he comprendido que no me merecías, he comprendido que nada es como
parece, que un día las cosas son de color rosa y el siguiente son
verdes, que los sabores cambian, que tu, cambiaste de un día para
otro. Se que debería estar triste y lo estoy, pero por otro lado
estoy bien me siento genial por ti, hiciste que abriera los ojos y
mostrarme que todos son iguales, como las gotas de agua. ¿Alguna vez
han jugado a “Buscando a Wally”? Pues esto es igual, pero un poco
más complicado, no es un libro, es la vida real, y que cada
movimiento que hacemos puede cambiar lo que pase luego, es una teoría
que en mi caso es cierta, o al menos ahora mismo. Hoy pasaré del
paso, lo dejaré estar en el aire, me comprometo a no volver a llorar
por ti, no vale la pena, aunque todavía sienta ese cosquilleo en el
estomago cuando te veo, puede ser de rabia, pero no es la única
posibilidad.
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